¿Dolor de espalda? Recomendaciones.

Un de las consultas recurrentes que recibimos en la farmacia son las relacionadas con el dolor en la zona de la espalda… se trata de un tipo de problema que los pacientes nos refieren con los más diversos nombres, que van desde lumbalgia hasta lumbago o simplemente dolor de espalda…

Encontramos que lumbago y lumbalgia es lo mismo, siendo el lumbago la expresión coloquial de la lumbalgia. Pues bien, se define la lumbalgia como el dolor de la zona lumbar, de la región de la espalda situada entre las últimas costillas y la zona glútea, causado por alteraciones de las diferentes estructuras que forman la columna vertebral a ese nivel, como ligamentos, músculos, discos vertebrales y vértebras.

Según la persistencia del dolor, podemos clasificar la lumbalgia en dos tipos:

• La crónica y la aguda, la primera es cuando este dolor dura más de 6 semanas y la otra si el periodo es inferior a estas 6 semanas.
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Y si el médico descarta que la procedencia del dolor sea una fractura, golpe o algún tipo de enfermedad sistémica, entonces hablamos de una Lumbalgia Inespecifica.

En este tipo de afección, el farmacéutico comunitario tiene la oportunidad de posicionarse como una herramienta de primer orden tanto en la detección de signos de alarma como en el consejo farmacéutico enfocado tanto en la prevención como en la dispensación activa.

Como acabamos de decir, debemos tener la capacidad de reconocer los signos de alarma en el paciente e informarle, ya que las lumbalgias pueden deberse a causas muy dispares que pueden ir desde las más evidentes, como un traumatismo, hasta afecciones subyacentes más graves que abarcan diversos tipos de enfermedades sistémicas. De tal manera que si estas señales de alarma están presentes es conveniente la derivación al médico para su valoración.

Entre los signos de alarma que nos podemos encontrar tenemos:

• Pérdida de peso inexplicable.
• Parestesia de los miembros.
• Pérdida de control de los esfínteres.
• Antecedentes de cáncer.
• Dolor que aparece por primera vez en menores de 20 años o en mayores de 55 años.

A su vez, en el mostrador es imprescindible un adecuado consejo farmacéutico y una dispensación activa, ¿Qué consejos podemos dar a los pacientes? algunas recomendaciones:

• Estos problemas se pueden prevenirse con simplemente mantener buenos hábitos, una correcta postura, dormir en condiciones optimas. 
• Cuidar el peso y practicar ejercicio de forma habitual, un ejercicio adecuado a la edad y forma física previa.
• En el ámbito doméstico evitar sobrecargarnos de peso y a la hora de levantar peso, hacerlo de una manera adecuada, flexionando las rodillas y no la columna.
• Fortalecer la musculatura abdominal, lumbar y de los glúteos.
• No automedicarse… acudir siempre a un profesional, normalmente receta algun analgesico o un antiinflamatorio.

Aprovecha la juventud para tener salud para rato. Si compartes mi opinión o agregarías algo, me encantaría saberlo.

Agradecido por tu atención, Afif Ayache.